La inversión en terrenos para renovables4 min read
Tiempo de lectura: 3 minutosTexto: Juan Arena, Socio Responsable Dehesa Partners
A pesar del ruido proveniente de algunas noticias que cuestionan su rol en el mix energético global, lo cierto es que la generación renovable continúa ganando peso y en algunos casos supera la potencia instalada de fuentes fósiles. Grandes inversores y compañías energéticas, conocedores de la solidez de esta industria, mantienen su apuesta de largo plazo. No es una mera cuestión de ser verdes. Europa necesita independencia energética para un desarrollo sostenible de su economía (en algunos casos de la mano de nuevos modelos de negocio muy intensivos en consumo energético, como son los centros de datos o movilidad). Ya vimos con el inicio de la Guerra de Ucrania, la volatilidad y alto coste que supone para Europa depender de terceros en materia energética.
En este inmenso sector de la generación renovable, existe un eslabón de su cadena de valor que pasa desapercibido, pero que atesora un potencial tremendo si se aborda de manera adecuada. La inversión y gestión de terrenos para plantas renovables.
El terreno es para cualquier proyecto de renovables una pieza fundamental. Sin éste no hay proyecto, tan simple como eso. Sin embargo y a pesar de esta realidad, la gestión de los terrenos supone un reto para desarrolladores y operadores de parques renovables por 3 motivos fundamentales:
- El primero por su poco peso en el contexto global de proyecto. La industria se juega el tipo en la infraestructura que aglutina el grueso de la inversión y que goza además de ser un estimulante reto ingenieril. Además, la renta del terreno pesa poco en los márgenes del proyecto.
- En segundo lugar, por lo arduo de la gestión de los propietarios de terrenos. La estructura de propiedad de los terrenos suele estar muy fragmentada, lo que eleva la carga burocrática. No ayuda en esta gestión el hecho de que la industria de las renovables esté formada fundamentalmente por perfiles técnicos o financieros, lejanos de la realidad y motivaciones del mundo rural en el que viven sus arrendadores para esta cuestión.
- Por último, el operador en muchas ocasiones se ve obligado a comprar el terreno para sacar adelante el proyecto, algo que no siempre encaja en su estrategia de inversión.
Los problemas anteriores, son a su vez palancas de esta tremenda oportunidad:
- Gracias al particular rol del terreno en el proyecto de renovables (pesa muy poco en la inversión y los costes, pero juega un papel clave), este goza de una posición de riesgo privilegiada. La renta del terreno nunca se deja de pagar. No mueve la aguja de la rentabilidad y sin embargo una desavenencia con este stakeholder puede tener consecuencias fatales para el operador. Como referencia, en la gran crisis vivida en el sector en 2012 en España por el déficit tarifario (y que ha llevado al reino de España a perder multitud de arbitrajes frente a inversores internacionales) no se conocen precedentes de contratos en mora, a pesar del devastador panorama que el cambio de reglas dejo a la industria.
- La gestión de los terrenos y sus propietarios requiere de unas capacidades muy específicas para ser capaz de crecer de forma capilar en este particular mercado, pero que bien enfocadas y explotadas pueden generar mucho valor y crecimiento: Adquiriendo terrenos cuando el operador no quiere hacerlo, tomando posiciones en la base de propietarios que permitan al operador reducir la carga burocrática y dando soluciones a propietarios particulares cuyos activos representan una parte importante de su patrimonio.
La inversión en contratos de arrendamiento es algo que se viene haciendo desde hace años, algunos de muchísimo éxito. Radius Global es un ejemplo de ello. Esta compañía invierte en terrenos y rentas para la industria de las telecomunicaciones (son los dueños de terrenos donde se colocan torres de telecomunicaciones), sector con muchas similitudes al de las renovables. En el año 2019 Radius salió a bolsa en EE. UU. y tras 3 años fue adquirida por dos de los más relevantes inversores de la esfera internacional como son EQT y el fondo de pensiones canadiense PSP, generando un retorno muy relevante a sus inversores.
Dada la evolución del mercado de las renovables, y la importancia que juegan los terrenos en esta industria, consideramos que el perfil rentabilidad/riesgo se antoja inmejorable y la oportunidad y momento de mercado, lo convierten en una oportunidad de inversión muy atractiva, siempre y cuando se consiga un volumen adecuado para gestionar los activos de manera eficiente.